viernes, 19 de febrero de 2010

Empalagame que me gusta

Cuando un partido se pone complicado y el DT decide guardarse los movimientos tácticos en el bolsillo, mandar lo que tenga al área y sacar centros de donde pueda, son pocos los que quedan en el fondo por algún descuido y ante la posibilidad de algún contragolpe, estos deberán correr y pensar más para suplir a todos los que no están. En este momento de semivacaciones me encuentro en una situación parecida como, intuyo, tantas otras personas en diferentes aspectos, ya sea laborales, relacionados al estudio o a las relaciones interpersonales.

Aún así trato de encontrar el hueco y enfrentarme a la hoja en blanco.

Pocos momentos cotidianos son más felices en la vida de un chico que cuando ingresa a un kiosco. Obviamente no hablamos de un mendikiosco sino esos con aire acondicionado, donde toda la mercadería está, vidrio de por medio, expuesta y pidiendo a gritos que te la lleves, que la devores, que la hagas tuya. Cuáles son los motivos por el cual uno no pone los brazos en canasta y se lleva todo?

Primero, que hoy un chocolate cotiza en bolsa. En segunda instancia, que si bien todo tienta y es lindo saber que todos los chocolates se mueren porque los comas, hay una realidad de que no todos son iguales y no todos gustan de la misma manera. Entonces si uno opta por alguno, el otro pensará que esta persona no entiende nada sobre chocolates. Pero es así, en la vida hay que elegir y no todos saben hacerlo. Para elegir hay que tener cintura.

Por este motivo, y para no generar confusiones, trataré de develar la verdad sobre esta comida (muy) erróneamente relacionada con la infancia.

Para comenzar trataré de eliminar de la competencia todos aquellos que portan algún tipo de elemento ajeno a la comida y que son adquiridos por eso. Ejemplifico: Los dos corazones. Uno de los chocolates más feos que puede tener un kiosco, pero que muchos lo compran por el mendipoema que viene anexo. Vulgar como pocos.
Como estos suprimo a aquellos chupetines que vienen en caja con sorpresa cual huevo kinder. Donde se caga no se come. Si sos chupetin no podes venir en caja y taer sorpresas. Si queres traer sorpresas, operate para el cambio de sexo y hacete cajita feliz.

Claramente hay pocos chupetines válidos. Los pico dulce (comunes, multicolores, nada de cosas nuevas, azules? negros? gilada....),los que nadie sabe como se llaman ni de que marca son pero los comió toda la infancia, el clásico palito con el chupetin esfera arriba (peleas por el de gusto a coca) y finalmente, su excelencia en chupetines, si no me equivoco se llamaba babydoll. Qué puede ser malo si viene de a cuatro?????

Caramelos y chicles suprimo. Esas no son golosinas, son entremeses. Quizás un butter toffies pueda entrar en la conversación pero será rápidamente eliminado. El resto, ni se gasten.

Volviendo a los chocolates, empecemos a eliminar de a poco.
Chocolate con maní, nuez, avellanas, sarasa, out. Incluso mi amigo Toblerone, perdoname, pero no va.
El chocolate blanco es bueno, es válido. Si estas en una reunión y se terminó el negro se puede comer, sino es perder el tiempo.
Chocolate cabsha: bomba de humo.

Dentro de esta breve selección empezaré a destacar algunos en forma progresiva ascendente:
Chocolate Jack: Buen sabor, el muñeco suma mucho, pero el chocolate lo vale.
Kinder (todas sus formas): La partenegra mezclada con la blanca dá una sensación única, pero le falta para encabezar.
Bizznike: Fantástico, clave. Error de marketing, el individual es muuuy chico, el otro es muuuy grande.
Chocolates lindt: Espectaculares y con alto índice de adicción. Gracias a d10s se consiguen en pocos lugares, sino la sociedad estaría perdida

Y finalmente llegamos al podio. No me voy a animar a hacerlos en escala, el orden puede variar según gustos, pero son estos 3:

Chocolate Marroc, todavia no se que garcha es eso marron del medio, pero es infaltable.

El ultimo Milka que habia salido de chocolate con pedazitos de Oreo. siempre pregono aquellas comidas que son capaces de unir varias dentro de la misma. La unión hace la fuerza decían...

Finalmente nombro un chocolate con el que más de una vez me han comparado (no entiendo demasiado la razón). Chocolate Toffi negro con dulce de leche adentro. Da ganas de emborracharse de dulzura hasta la cirrosis.

Para otro día dejaré mi especialidad, los alfajores, ya que merecen capítulo aparte.

Digan lo que quieran, pero sobre gustos (de golosinas) ahora hay algo escrito.

2 comentarios:

  1. Priemero gracias por escribir solo para mi jaja


    Es un tema muy complicado, con algunas contradicciones, y mucha variedad...

    No pueod creer que de una eliminaste chocolates con mani y otros agregados, eso quiere decir que nunca probaste el milka con galletita ese grandote con una cosa blanca q nose que carajo es...o las bolitas lindt, hay uno que viene con lamendras creo, ufff

    yo bacno a muerte el chocolate blanco!!

    ah, y le daria un lugarcito al block...

    abrazo grande

    20

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  2. jajaja, un placer pablito

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